top of page

Artículos sobre Ayuda Psicológica

Actualizado: 9 abr 2024

¿Alguna vez te ha pasado, con alguno de tus #hijos, que te pones a pensar porqué se comporta de determinada manera que no te gusta y que por más que le dices lo que tiene que hacer, no logras nada con él o con ella?.


Mil veces te has preguntado, ¿porquè mi hijo no escucha? ¿comó mejorar la obediencia?. Pero tal vez no te has puesto a pensar que realmente no le preguntas cómo se siente o porqué se comporta así, quizás si te acercas un poco y le empiezas a pedir su opinión podría mejorar un poco su relación.


Como dicen últimamente los #memes en las redes sociales, “el #hijo que te cuesta más” y se refiere que te cuesta más educarlo y formarlo. Este tipo de niños o adolescentes, es el que se convierte en el que "no ves", porque nunca te pide nada. Generalmente es el que se la pasa encerrado en su cuarto pero de pronto te empieza a dar problemas tales como que te llaman del colegio porque agredió a un compañero o de pronto empiezas a ver destrozos en la casa o te empieza a contestar mal, no sigue instrucciones, no respeta las reglas de la casa, entonces de ser el #hijo que no ves, se convierte en el hijo que más te preocupa.


Paternidad
Paternidad

Es el #hijo que está tratando de llamar la atención, tu atención, principalmente como #madre o #padre, quiere que lo veas que te preocupes por cómo se ha sentido, que le preguntes si le gusta el deporte al que lo llevas, etc.


Los niños y las niñas necesitan sentirse queridos a cualquier edad. Si nosotros como adultos necesitamos cariño de familia, amigos, de una pareja. Con mayor razón nuestros hijos. Esto es vital para su experiencia y su #autoestima. Cuando nuestros hijos no dudan que los vemos, pero sin usar comparaciones, ni críticas, ni etiquetas, crecen como adultos que se contemplan a sí mismos de manera positiva y son capaces de ver a los demás.


Por lo general como seres humanos nos fijamos siempre en lo que falta en alguna situación, entonces a partir de ahora hay que remarcar las situaciones y detalles positivos de nuestros #hijos. Por ejemplo:” hijo ahora en la mañana sonó tu alarma y te levantaste más rápido que otros días, te felicito, eres más responsable” o cuando alguno de tus #hijos hace algún comentario en el que puedes participar, exprésale tu opinión, eso hace que ellos sientan que sus cosas y lo que les pasa es importante para nosotros.


Paternidad
Paternidad

Cuando le pides que limpie su cuarto y ves que solamente ha tendido su cama, dile “hijo muy bien, ya tendiste la cama y te quedó muy bien, te felicito, creo que no tardarás mucho en dejar limpio tu espacio. Otra opción es hacerlo junto con él. Recuerda que los niños aprenden también con el ejemplo.


Hay otra parte en la que también caemos comunmente que es la comparación con nuestros #hijos. El #hijo del vecino es muy guapo o es muy amable y educado, así lo afirmamos a nuestros #hijos sin saber que a lo mejor ese niño tiene problemas de aprendizaje o vive muy solitario, no podemos saber, ni podemos comparar, ni siquiera con los mismos hermanos.


Centrarnos en resaltar las virtudes de nuestros #hijos. Y a lo mejor también lo que no hacen muy bien, para motivarlos a que se esfuercen más cada vez y logren hacerlo mejor.

Para los niños no hay nada peor que no aprobar el examen de sus padres, ver como su padre o madre admira al hijo del vecino o de sus amigos. Expectativas irracionales pueden tener un efecto devastador en el #autoestima de nuestros hijos, Así que míralos bien, aun cuando no es fácil.


Quieres saber más acerca de este tema, acércate a un psicólogo, toma terapia o toma sesiones para padres, porque nadie sabemos cómo ser padres y madres, sólo conocemos la forma en que nos educaron a nosotros.

Acércate a los especialistas, no te vas a arrepentir de tener una mejor relación con tus hijos, hijas y aún con tu pareja.


Lic. Rocío Argüelles.



 
 
 
  • 8 jun 2023
  • 3 Min. de lectura

Cuando somos #padres o #madres, nos preocupa que nuestros hijos sepan porqué se encuentran tristes o preocupados, alegres o enojados, que elijan lo que más les conviene, que se comprendan y acepten sus limitaciones, que solucionen los problemas de una manera que los fortalezca y les proporcione autoestima.


Ésto comienza con nuestra manera de escucharlos. Desde lo que les pasa en el

#colegio, con su mejor amigo (a), lo que pasó en el último capítulo de su serie

favorita, cómo les fue en la fiesta con sus compañeros, o estar presentes en el

último partido de futbol, hasta cuando les sucede una situación difícil o complicada, o cuando no saben que hacer en determinada circunstancia.


ree
Familia

Hay #padres que les cuesta escuchar a sus #hijos y se expresan de la siguiente

manera: "¿Que platique con mis hijos?, ¿para qué?, ¿de qué?, yo trabajo mucho para darles lo que necesitan y eso es suficiente. Su mamá es la que se encarga de esas cosas, por eso está más tiempo en la casa, para estar al pendiente de ellos. A nosotros nuestros #padres nunca nos escuchaban, es más ni siquiera nos pedían una opinión".


Y no se diga cuando la mamá le dice al papá que uno de sus hijos necesita

#terapia, ir al #psicólogo porque en el colegio lo están enviando, entonces sí "arde Troya" y el papá se enfurece y dice: mi hijo no necesita un #psicólogo, no está loco. Entonces le toca a la mamá tratar de tranquilizarlo y explicarle de la mejor manera posible la situación de su hijo, para que acceda a permitir que el niño tome terapia.


Qué situación tan difícil, ¿verdad? Entonces ¿cómo enseñamos a nuestros hijos

a #escuchar?, porque recordemos que los niños aprenden mucho del ejemplo de los padres.


Muy bien veamos, cuando el #bebé llega al mundo la única forma de comunicarse es mediante el llanto, no tiene otra forma de darse a entender, entonces cuando llora el #bebé la madre atenta es la que asiste a ver que necesita el bebé, si tiene hambre, frio, sueño, está mojado o simplemente necesita cariño y quiere que #mamá lo cargue en brazos y sentirse protegido.


Es decir, para el bebé es muy importante que #mamá o #papá se acerque a ver qué necesita su #hijo. Entonces el bebé se siente querido y atendido y eso le proporciona al niño seguridad para su presente y futuro.


Cuando nuestros hijos son niños que andan jugando y se caen, mamá o papá

acuden a su auxilio y generalmente le dicen al niño: “no pasa nada hijo”, pero

realmente si está pasando, al niño le duele porque se lastimó, entonces más bien

hay que atenderlo y curarlo, tratar de minimizar el dolor. Y estar con ellos hasta

que se sientan mejor y puedan regresar a jugar o a hacer lo que estaban haciendo

antes.


ree
maternidad

Cuando nuestros hijos nos piden algún consejo sobre alguna situación que les ha

sucedido, lo primero que tenemos que hacer es preguntarles: ¿cómo ves?, ¿qué crees? ¿qué podrías hacer?, a veces los #niños tienen mejores ideas que nosotros los adultos, nada más que no los hacemos meditar un poco en la situación y les damos la solución inmediatamente.


Ahora bien, si no tienen ninguna idea, podemos ayudarlos con varias soluciones. Cuando los niños nos cuentan algo que les pasa y escuchamos con atención, dejando de lado lo que estábamos haciendo, ellos sienten que son importantes

para nosotros, y se sienten comprendidos, por ejemplo si se caen y se lastiman para ellos cuenta mucho el que nosotros preguntemos: qué pasó, cómo te lastimaste, tropezaste o no viste el cajón que estaba abierto. Inmediatamente ellos empiezan la narración de cómo ocurrieron los hechos y automáticamente se desahogan y se sienten un poco mejor, después cuando les decimos “debes tener cuidado, fíjate por donde vas caminando° entonces toman en cuenta nuestros consejos, para que no les vuelva a pasar.


Entonces tus #hijos sienten: “Cuando tú me escuchas a mí, me estás enseñando a escuchar y entonces yo podré escucharte a ti y después a los demás”.

¿Te gustaría saber más del tema? Asiste a asesoría psicológica. Con gusto te

ayudamos.


Lic. Rocío Arguelles

 
 
 

Ser #madre es un trabajo de 365 días, las 24 horas y los 7 días de la semana. ¡Es demasiado tiempo! Uno pensaría: ¿cuándo hay descanso?. Y muchas #mamás amamos ese trabajo y deseamos ser las mejores. Pero, ¿qué pasa cuando nos topamos con tanta información y de tantos lados? En este artículo podrás encontrar una orientación desde un punto de vista tanto profesional como de mamá.


Al ser #mamás nos llegamos a preguntar si lo que estamos haciendo está bien, si lo que hacemos como #madre es suficiente para hacer que nuestros hijos o hijas crezcan como buenas personas, si estamos teniendo una buena crianza y a la larga no les causaremos traumas.


ree
maternidad

Es muy cansado y abrumador tener tantos pensamientos propios de qué y cómo se hace para ser una buena madre y súmale que aún ni siquiera ha nacido tu #hija o #hijo y ya comienzas a escuchar qué debes y qué no comer, cómo hay que dormir, qué actividades ya no puedes realizar, etc. Una vez que ya nació hay que escuchar a todas las personas que sienten la necesidad de compartir lo que ellxs creen que es mejor para tu bebé y en muchas ocasiones se agradece y más cuando eres primeriza. La diferencia en que te angusties o lo tomes con calma por tanta información que llegas a recibir está en que tú puedas tener claro qué es lo que a ti te funciona como #madre y cómo deseas criar a tus hijxs de una manera consciente.


No existe en sí un manual que nos diga cómo ser madre, sin embargo sí hay pautas que podemos llevar a cabo para tener una maternidad que nos haga saber y sentir que lo estamos haciendo bien. Aquí te dejo 8 pautas que te servirán para lograrlo:


  • Conócete. Si tú aprendes a reconocer cuando algo te está molestando y sabes qué hacer al respecto por consiguiente obtendrás el mantenerte en equilibrio.

  • Mantente sana. Necesitas estar bien física, mental y emocionalmente. Crea buenos hábitos; haz ejercicio, ten hobbies, crea espacios para ti, alimentación balanceada, ve a #psicoterapia.

  • Regula emociones. Todas las emociones son necesarias, reconócelas, déjalas estar, identifica de dónde provienen y haz algo al respecto.

  • Paciencia. Respira conscientemente en vez de gritar o perder el control de ti. Incluso puedes retirarte del lugar para que puedas tranquilizarte y después volver. Pide disculpas, explica lo sucedido contigo y hasta tu hija o hijo, dependiendo de la edad, te pueden decir qué les parece que puede funcionar y así de paso también les enseñas a fomentar su criterio.

  • No controles. Recuerda que son individuos. Sí, sí son nuestros hijxs y somos los responsables de guiarles, educarles, pero también de escucharles y comprender que también deben aprender a tomar sus propias decisiones; acompañarlos desde el amor y no desde el control.

  • Comunícate. Escucha lo que tienen para decirte. Ten apertura a lo que no les parece. Juntxs tengan retroalimentación para crear cambios. Practica la comunicación asertiva.

  • Conecta. Encuentra actividades que generen unión, confianza y cercanía. Juega de verdad, diviértete con ellxs.

  • Límites. Claros, congruentes y estables. Les brinda organización y seguridad. No los generes del miedo o amor condicionado.



No te preocupes si te va costando trabajo el realizar varias o todas las pautas anteriores, es completamente normal que sea así porque no estás acostumbrada. Sé paciente contigo.

Criemos hijas e hijos conscientes, sanos en todos los sentidos y para ello requerimos primero hacerlo con nosotras para poderles enseñar.

ree
maternidad

Acuérdate que no hay madres perfectas, sólo eres tú y eso es lo perfecto. Tu #hija o #hijo tendrá lo que necesita contigo siendo su #mamá que practica lo que se expuso en este artículo. Si en algún punto sientes que el ser #madre y todo lo que conlleva te sobrepasa, asiste con una #psicóloga o #psicólogo para que te sientas orientada y vayas descubriendo los pensamientos y emociones que te van impidiendo ser la mamá que tanto tú como tus hijos y/o hijas necesitan y no “morir” en el intento.


Psic. Itzel Trejo



 
 
 
bottom of page