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Artículos sobre Ayuda Psicológica

  • 29 jun 2023
  • 3 Min. de lectura


Todos los años se celebra el día del #padre el tercer domingo de junio. La idea surgió en 1910 por una mujer estadounidense, sin embargo fue hasta 1950 cuando se generalizó en las escuelas de México.

En el presente artículo se tienen los objetivos de exponer temas que usualmente no se hablan y con ello generar un cambio.


Estamos acostumbrados a escuchar acerca del trabajo que realizan las mamás con los hijos e hijas, como si el bienestar de las familias o el crecimiento sano de las niñas y niños dependiera solamente de ellas, cuando la realidad es que la presencia de un #padre es igual de importante.

El vínculo, atención, apego y participación que el padre crea refuerzan una infancia sana, segura y feliz.


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paternidad

Hablemos de estadísticas, el Censo de Población y Vivienda 2020 detalló que sólo el 0.5% de los hombres declararon ser #padres solteros, mientras que el 7% de las mujeres eran madres solteras. Yéndonos a una cifra alarmante es que 4 de cada 10 hogares en México vive sin un papá, o sea que en 11.4 millones de familias hace falta un #padre. La misma encuesta indicó que 53% de los mexicanos tuvo a su papá ausente o no a cargo de ellos por temas laborales.


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Paternidad

Desde hace miles de años se generó la creencia colectiva de que el #padre debe cumplir con el rol de proveedor, ausente por cuestiones de trabajo, autoridad y quien da los permisos; por otro lado la madre se responsabiliza de los cuidados, atiende y educa.

La sociedad ha creado que la “normalidad” sea que los papás estén de lado y no ayuda el que cómodamente muchos se queden en ese lugar. Pensémoslo, ¿usualmente a quién nos dirigimos para preguntar cosas relacionadas con los bebés, como cuánto pesa, ya camina, comportamientos, etc?

¿Por qué funciona así? Se debe a que damos por hecho que el padre no sabe ese tipo de cosas, pensando que no se involucra.

Por otro lado, una frase que se suele usar bastante es la de “hijo/hija de tu madre”, algo que pareciera tan insignificante nos hace analizar que claro que tenemos el concepto de que papá no ocupa el lugar que le corresponde.

Generemos un cambio desde este tipo de cosas tan sencillas, necesitamos concientizarnos que padres y madres requerimos trabajar equitativamente, es un trabajo en equipo, una corresponsabilidad. Los padres que están leyendo esto que deseen que se les dé ese espacio siéntanse con la libertad y el derecho de hablar, de exigir lo que les corresponde.


No obstante, también hay que hablar de los #padres que han ido dejando atrás la idea de #paternidad tradicional. En la actualidad la #paternidad se ha involucrado en la crianza equitativa de las hijas e hijos. Algunos factores han cambiado para que muchos hombres busquen una paternidad más cercana. Uno de ellos es el deseo de ser diferentes a sus propios padres, querer ser más cercanos emocional y afectivamente.

Ser #padre ¡sí está padre! Te permite aprender, crecer, conectar y hasta te divierte.


Ejercer una paternidad activa significa tener una relación afectuosa con las #hijas y/o #hijos, participar en el cuidado diario, generar una crianza respetuosa, fomentar un vínculo amoroso, estar involucrado en todos los momentos de su desarrollo.


¿Sabías que la #paternidad consciente y activa tiene beneficios tanto en los #hijos e hijas como en los #papás? Te los platico:


En los padres:


  • Niveles más bajos de estrés.

  • Mejor salud física y mental.

  • Menor riesgo de abuso de sustancias.

  • Previene violencia y maltrato infantil.

  • Mejor calidad en la relación de pareja. Esto se debe a que al involucrarse en la crianza se disminuyen las labores para la mamá.


En las hijas e hijos:


  • Tienen más herramientas para enfrentarse ante la vida.

  • Mayor probabilidad de ser un padre/madre comprometido.

  • Se desarrolla mejor autoestima.

  • Más habilidades sociales.

  • Mejor desempeño en la escuela.

  • Fomenta la inteligencia emocional.



Dejaré una pregunta para reflexionar, ¿qué celebramos el tercer domingo de junio, al padre que nos hace saber que nos ama, que haría todo por nosotros, el que está presente, el que nos guía o en realidad sólo lo hacemos por tradición y desearíamos que nuestra relación con #papá fuera distinta? Si crees que hay cosas que tienes que resolver en la relación con tu padre, asiste con una #psicóloga o #psicólogo para que juntos puedan encontrar maneras de fomentar tu bienestar.


Psic. Itzel Trejo

 
 
 
  • 8 jun 2023
  • 3 Min. de lectura

Cuando somos #padres o #madres, nos preocupa que nuestros hijos sepan porqué se encuentran tristes o preocupados, alegres o enojados, que elijan lo que más les conviene, que se comprendan y acepten sus limitaciones, que solucionen los problemas de una manera que los fortalezca y les proporcione autoestima.


Ésto comienza con nuestra manera de escucharlos. Desde lo que les pasa en el

#colegio, con su mejor amigo (a), lo que pasó en el último capítulo de su serie

favorita, cómo les fue en la fiesta con sus compañeros, o estar presentes en el

último partido de futbol, hasta cuando les sucede una situación difícil o complicada, o cuando no saben que hacer en determinada circunstancia.


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Familia

Hay #padres que les cuesta escuchar a sus #hijos y se expresan de la siguiente

manera: "¿Que platique con mis hijos?, ¿para qué?, ¿de qué?, yo trabajo mucho para darles lo que necesitan y eso es suficiente. Su mamá es la que se encarga de esas cosas, por eso está más tiempo en la casa, para estar al pendiente de ellos. A nosotros nuestros #padres nunca nos escuchaban, es más ni siquiera nos pedían una opinión".


Y no se diga cuando la mamá le dice al papá que uno de sus hijos necesita

#terapia, ir al #psicólogo porque en el colegio lo están enviando, entonces sí "arde Troya" y el papá se enfurece y dice: mi hijo no necesita un #psicólogo, no está loco. Entonces le toca a la mamá tratar de tranquilizarlo y explicarle de la mejor manera posible la situación de su hijo, para que acceda a permitir que el niño tome terapia.


Qué situación tan difícil, ¿verdad? Entonces ¿cómo enseñamos a nuestros hijos

a #escuchar?, porque recordemos que los niños aprenden mucho del ejemplo de los padres.


Muy bien veamos, cuando el #bebé llega al mundo la única forma de comunicarse es mediante el llanto, no tiene otra forma de darse a entender, entonces cuando llora el #bebé la madre atenta es la que asiste a ver que necesita el bebé, si tiene hambre, frio, sueño, está mojado o simplemente necesita cariño y quiere que #mamá lo cargue en brazos y sentirse protegido.


Es decir, para el bebé es muy importante que #mamá o #papá se acerque a ver qué necesita su #hijo. Entonces el bebé se siente querido y atendido y eso le proporciona al niño seguridad para su presente y futuro.


Cuando nuestros hijos son niños que andan jugando y se caen, mamá o papá

acuden a su auxilio y generalmente le dicen al niño: “no pasa nada hijo”, pero

realmente si está pasando, al niño le duele porque se lastimó, entonces más bien

hay que atenderlo y curarlo, tratar de minimizar el dolor. Y estar con ellos hasta

que se sientan mejor y puedan regresar a jugar o a hacer lo que estaban haciendo

antes.


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maternidad

Cuando nuestros hijos nos piden algún consejo sobre alguna situación que les ha

sucedido, lo primero que tenemos que hacer es preguntarles: ¿cómo ves?, ¿qué crees? ¿qué podrías hacer?, a veces los #niños tienen mejores ideas que nosotros los adultos, nada más que no los hacemos meditar un poco en la situación y les damos la solución inmediatamente.


Ahora bien, si no tienen ninguna idea, podemos ayudarlos con varias soluciones. Cuando los niños nos cuentan algo que les pasa y escuchamos con atención, dejando de lado lo que estábamos haciendo, ellos sienten que son importantes

para nosotros, y se sienten comprendidos, por ejemplo si se caen y se lastiman para ellos cuenta mucho el que nosotros preguntemos: qué pasó, cómo te lastimaste, tropezaste o no viste el cajón que estaba abierto. Inmediatamente ellos empiezan la narración de cómo ocurrieron los hechos y automáticamente se desahogan y se sienten un poco mejor, después cuando les decimos “debes tener cuidado, fíjate por donde vas caminando° entonces toman en cuenta nuestros consejos, para que no les vuelva a pasar.


Entonces tus #hijos sienten: “Cuando tú me escuchas a mí, me estás enseñando a escuchar y entonces yo podré escucharte a ti y después a los demás”.

¿Te gustaría saber más del tema? Asiste a asesoría psicológica. Con gusto te

ayudamos.


Lic. Rocío Arguelles

 
 
 

Cuando nos convertimos en #padres y #madres, nunca imaginamos todo lo que implica tener un (a) bebé en nuestros brazos. Nos hacemos grandes expectativas y esperanzas en torno a eso, ¿qué será de grande?, ¿qué carrera estudiará?.


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Infancia

Queremos formar una buena persona, llena de #responsabilidad y #valores. Que tengan confianza en sí mismo, capacidad de distinguir entre el bien y el mal y que maneje adecuadamente frustraciones y dificultades, la desconfianza con respecto a quienes puedan herirlos, a la vez que la confianza en los demás y que puedan tener relaciones saludables. Nadie nos enseña a ser #padres, sólo lo que conocemos de cómo nos criaron nuestros padres. Y en ese camino vamos aprendiendo muchas cosas.


Tratamos de enseñarles a nuestros #hijos sobre todos los temas, pero por algún motivo, la #sexualidad, la pareja, las relaciones íntimas y el cortejo no están entre ellos, no sale de manera natural hablar de estos temas con los #niños y #adolescentes, quizá la razón es porque nuestros padres no hablaban para nada de ello con nosotros, eran temas difíciles y preferían no hacerlo.


Así, de este modo lanzamos a nuestros #hijos al mundo sin prevenirlos de los pedófilos y con la esperanza de que sean buenas personas y que traten bien a sus parejas.


Pero hay que tener en cuenta que la educación incluye si o si educación #sexual y #respeto. Cuando los niños crecen y entran en la lucha caótica de las relaciones íntimas suelen tropezarse con conflictos de intereses y señales contradictorias: yo quiero y ella no; ella quiere hablar y yo tocar; ella me ha indicado algo y yo lo he malinterpretado; ella quiere dar el siguiente paso y yo no estoy preparado. Todo eso se mezcla con impulsos hormonales que se interponen en el camino de la razón.


Además del ejemplo que vean en casa, debemos equiparlos con valores bien arraigados y asegurarnos de que acudan a nosotros siempre que lo necesiten, es decir, que nos tengan la suficiente confianza por cualquier duda que pudieran tener. Tenemos que ser francos y abiertos con nuestros hijos al hablar de cualquier tema. Pero de verdad de cualquier tema.


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Infancia

De tal modo, que desde que son pequeños, les preguntamos si se sienten cómodos con que los abracemos y seamos cariñosos con ellos. Y así los estamos enseñando a expresar lo que sienten cuando alguien se les acerca. Cuando tienen siete años, mencionamos el amor, cómo se hacen los bebés, la sensación agradable y la voluntad de ambas partes. Cuando tienen doce años y mientras ven las noticias con nosotros, comentamos el caso de #abusosexual, del que han hablado, no mencionando lo horrible que es, sino señalando lo confuso que puede resultar y cómo eso es lo peor. Es mejor preguntar y no dar por supuesto que la otra persona quiere lo mismo que nosotros. Les explicamos que tienen que fijarse en la expresión de la cara y el cuerpo.


Ahora bien cuando ya son adolescentes, hay que platicarles alguna anécdota de nosotros a su edad y así entrar en confianza para hablar del tema.

Platicarles que como #adolescentes esta es la realidad con la que se van a topar, los chicos comentan lo lejos que han llegado y se comparan entre ellos y las chicas hablan en susurros sobre las posibilidades de enamorarse y ser correspondidas. Pero no siempre tiene que ser así. La apariencia de una persona o la comunicación que recibes de las chicas, puede resultar ser un interés mutuo en el contacto #sexual o del mismo modo una invitación a una relación.


Hijo, no seas de esos chicos que alardean de las experiencias que has tenido con las chicas y cuales son esas chicas, ni tampoco la chica que dejaste o que consideras una pérdida de tiempo. Imagina que hablaran así de ti y no te gustaría.


Garantizarles a nuestros hijos que disfrutarán más del #sexo estando en una relación con amor y reciprocidad, amistad y diversión, cariño y entrega mutua.

Y siempre preguntar a tu pareja lo que le gusta y lo que no.


Lic. Rocío Arguelles






 
 
 
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